Hace años un viejo vestido de terciopelo negro llamo la atención de Riitta Päiväläinen en una tienda de segunda mano. No llevaba etiqueta, las costuras revelaban que estaba hecho a mano. Se probó el vestido y le quedaba perfecto. Le intrigó la historia de ese vestido. ¿Quién fue la mujer que encargó hacer ese vestido?¿Cuál sería la historia de su vida?
Su interés en la ropa vieja y usada es la fuerza primordial que mueve su trabajo. Para sus fotos usa desechos de ropa encontrados en mercadillos y tiendas de segunda mano. Le interesan porque llevan silenciosamente historias y relatos desconocidos, son vestigios del pasado. El hecho de que nunca sabrá sus verdaderas historias y los detalles personales conectadas a ellas estimula su curiosidad. Los ropajes se mantienen silenciosos guardando sus secretos.Reflexiona acerca de qué o quién es históricamente remarcable para ser grabado en la memoria y recordado, sin querer enfatizar en el significado histórico de la importancia de recordar todo y a todos. Tanto como recordar necesitamos también olvidar. En vez de insistir en lo que se ha perdido, a través de su fotografía pretende centrarse en lo que queda por descubrir.
Para ella cada prenda representa, sobre todo, a la persona que la vistió.
Dejando que la ropa se congele o se llene con el viento crea un espacio escultórico que evoca a esa persona ausente. De esta forma Riitta juega con las ideas de ausencia y presencia. De su trabajo, aquí os voy a mostrar las series que me resultan más interesantes por el papel esencial que en ellas tiene el paisaje: «Wind»,»Structura» y «Camouflage». Trabajar en la naturaleza implica acudir a ella, sentirla y convertirla en experiencia. Colocando la ropa en el paisaje Riitta crea instalaciones, convierte el entorno natural en un escenario y crea un dialogo, una interacción entre el ser humano y la naturaleza. Su intención es provocar historias potenciales, imágenes mentales y asociación de ideas.
Riitta cree que nuestra vida diaria esta llena de historia, esta fascinada por la historia no escrita. Puede sentir su presencia en un roto de un abrigo, el tejido raído y gastado de un sillón, o la huella de un pie dejada en la suela interna de un zapato.
El libro Imaginary Meetings reúne una retrospectiva de varios de sus proyectos. Sus intervenciones en la naturaleza me evocan emociones similares al trabajo de Andy Goldsworthy.
Päiväläinen pertenece a la joven y aplaudida Escuela de Helsinki, de la cual nos habló Juan Curto, de la Galería Cámara Oscura, al principio del Master. Con un estilo propio y una manera de entender la fotografía muy ligada a la cultura nórdica refleja su particular idiosincrasia, soledad, silencio, naturaleza y ambiente reflexivo con bastante evocación romántica. Esta escuela se ha convertido en marca, sus alumnos están representados por la Galeria Taik, dirigida y comisariáda por Timothy Persons, Director del Programa de Estudios Profesionales y profesor de la escuela. Aunque se la considera muy conceptual, los trabajos de los fotógrafos que salen de ella generan una gran respuesta emocional en el espectador.